miércoles, 2 de enero de 2013

Madeira Sponge Cake


         En esta entrada quería traer la receta del famoso bizcocho utilizado para las tartas Fondant, en este caso de vainilla. 
        Este es un bizcocho de miga dura, densa, que una vez frío y asentado se puede tornear fácilmente. 
       Una vez sacado del horno lo mas recomendable es dejarlo templar sobre una rejilla, desmoldarlo ( yo utilizo siempre moldes antiadherentes desmoldables), envolverlo en papel film y bolsa de plástico tipo congelación y al frigorífico para que conserven su humedad y no se queden secos.
       A la hora de prepararlo para rellenarlo, se saca de la nevera y se coloca en la mesa de trabajo bien despejada y bueno, a tornear.
    
       A estos bizcochos al hornearse les sale mucha joroba, (cosa que mi marido agradece porque siempre hay en casa un megatupper lleno de jorobas), con lo cual lo que yo hago primero es cortársela con el cuchillo de sierra cuidando de que el corte vaya a la misma altura por toda la circunferencia.

Con un rallador voy lijando los laterales de posibles imperfecciones dejandolo lo mas fino posible.

A continuación marco las capas que mas tarde rellenaré, (yo suelo hacer capas finas para que la tarta no quede seca) y paso la lira por ellas sin olvidar de clavar un palillo de dientes en cada capa de bizcocho y a la misma altura. De esta manera volverán a coincidir las capas una vez rellenas.

Y bueno, a rellenar con tus cremas favoritas.



Madeira Sponge Cake de Vainilla para molde redondo de 20 cm:


4 huevos 
200 gr mantequilla
200 gr azúcar
300 gr de harina
1/2 sobre Levadura tipo Royal
1 pizca de sal
2 cucharadas de esencia de vainilla


 
Preparacion:

  • Empezaremos por el principio, así que la mantequilla y los huevos estarán a temperatura ambiente, de lo contrario no saldrá como debe. Si estás en verano pues con unas horas antes es suficiente y si hace frío pues mi recomendación es que los saques la noche antes de la nevera.

  • Otro paso importante es tamizar la harina con la levadura y la sal para deshacernos de cualquier grumo o impureza y lo reservamos hasta que toque. Puedes usar un colador de malla fina si no dispones de tamiz.

  • Si lo vas a hacer en Thermomix pues poner en el vaso la mantequilla y el azúcar y programas 10 minutos a velocidad 4. La verdad es que yo carezco de paciencia y jamas llego a los 10 minutos, en cuanto creo que el azúcar se ha deshecho con la mantequilla y está bien blanquita la mezcla comienzo con el siguiente paso. Si vas a usar una batidora eléctrica habrá que poner otro ingrediente que es la insistencia y aguantar como una campeona hasta que la mezcla haya blanqueado.

  • Ir añadiendo los huevos uno a uno sin dejar de batir y no echar el otro hasta que este integrado por completo el anterior. Yo los huevos siempre los casco en un plato distinto del recipiente en el que voy a echarlos para evitar cualquier resto de cáscara o contaminación. 

  • Cuando se haya mezclado el último huevo agregar la vainilla 

  • El aspecto ahora de la mezcla es poco homogénea, pero se irá arreglando al ir echando cucharada a cucharada la harina con la levadura y la sal. En la Thermomix ir echándolas por el brocal sin dejar de batir y con batidora convencional pues en la medida de lo posible tampoco hay que dejar de batir.

Por último encamisar (mantequilla y harina) el molde de 20 cm y meter al horno precalentado a 165 grados alrededor de 45-50 minutos. El horno debe estar activado abajo y arriba con ventilador. Si no dispones de ventilador yo programaría a 170 grados.

Lo mas sensato es ir pinchando con una brocheta en la superjoroba que le sale a este bizcocho hasta que salga limpia, indicador científico de que está completamente hecho.

Suerte!!

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